# 27 Mucha economía, poca colaboración
Semana 27: El problema de los generales bizantinos en la vida real (más allá del Bitcoin)
🎂 Esta semana hemos pasado de los 2.000 suscritos a esta newsletter Digital & Data. La tasa de apertura media es del 44%. Que casi uno de cada dos, me leáis cada semana, me parece una pasada. ¡Gracias!
No tengo palabras para que en 26 números, que es justo la mitad de las 52 semanas de un año, hayamos llegado a esta cifra. ¡¡Muchas gracias por vuestro interés y atención!! En el camino no solo he aprendido qué gusta más y qué menos. También he conocido a mucha gente nueva. Y muchos mensajes muy interesantes. Lo dicho, ¡gracias! Escribir semanalmente me permite ordenar las ideas, pensar y reflexionar. Ser un mejor profesional. Y vuestra exigencia intelectual y vuestros constantes mensajes con ideas… lógicamente me ayudan a mejorar.
¡Gracias, de corazón! ❤️
📷 Una imagen
¿Tienes la sensación de llegar a fin de mes con problemas de datos disponibles en el móvil? La gráfica que nos acompaña hoy nos muestra las aplicaciones que más datos móviles consumen. Claramente se puede ver cómo el vídeo arrasa con nuestros datos. El móvil nos ha traído una sensación de “opciones ilimitadas” tremendas. La era digital trajo abundancia donde había escasez. Un compañero en la universidad, cuando le pregunto si ve Netflix o Prime Video, me suele responder que cómo va a tener tiempo para eso si todavía no ha terminado de ver todos los vídeos de Youtube. Yo también soy un romántico de la escasez. Recuerdo la sensación de ir a la librería de mi pueblo, con diez, doce o quince años, a ver qué novedades literarias o editoriales tenía. La escasez hacía que la sensación de descubrimiento fuera mayor. Lo que encontraba lo disfrutaba más, no pensando que ante tanta oferta, quizás estaba perdiendo el tiempo viendo algo. Ya sabéis que los humanos tenemos que buscar coherencia a nuestras decisiones para sentirnos bien. Y también sabéis que el coste de oportunidad explica muchas cosas en la vida (haber elegido bien entre las opciones disponibles). Por eso, la escasez, me gustaba más: no necesitaba justificarme la decisión y no pensaba que me había equivocado. Menos fatiga cognitiva. Pero, lo dicho, soy un romántico. No me hagan caso, y sigan con los bastos catálogos de películas, documentales y libros.
📚 Cinco lecturas
Este artículo me parece súper interesante. Viene a decir que las nuevas generaciones no se manejan bien por los directorios (carpetas) y que les cuesta encontrar ficheros cuando están organizados por carpetas. Se trata de una generación en la que Google nos ha acostumbrado a buscar todo. O tenemos un buscador para localizar, o nos sentimos incómodos. En una organización, cuando tenemos que organizar la documentación, tenemos dos opciones en general: (1) Carpetas y subcarpetas de toda la vida; (2) Un “espacio abierto”, todo al mismo nivel, donde los archivos son guardados con un nombre que sigue ciertas especificaciones y unos metadatos que facilitan su recuperación. Este tema me parece especialmente importante porque la gestión del conocimiento y de documentos de cualquier organización, seguirá creciendo en complejidad y siendo más relevante en utilidad. El sistema de carpetas es muy “personal” (cada uno a su manera), en una era en la que cada vez se trabaja de forma más compartida. El buscador, “democratiza”. ¿Ganarán las nuevas generaciones haciendo que las empresas tengan que implantar sistemas de búsqueda para todo?
Los que me conocen, saben que llevo años combatiendo el término “economía colaborativa” como “etiqueta” para algo presuntamente colaborativo que en realidad se rige por criterios de negocio de toda la vida. Cuando se creó, parecía interesante la idea. Usemos el ejemplo de AirBnB. Los dueños de alojamientos podían obtener algunas rentas alquilando activos que no iban a aprovechar. Los turistas, viviendas a precios más asequibles. El caso de Uber, prometía algo parecido. Sin embargo, con el paso del tiempo, todo se ha profesionalizado. Cada vez son mercados más tradicionales. Hay anfitriones de AirBnB que obtienen importantes rentas. De hecho, un paper de 2019 pone cifras a esto: un 60% de la oferta de Airbnb a nivel mundial está en manos de un conjunto de empresarios que tienen numerosas propiedades. Mucha economía y poca colaboración.
Francia ha prohibido a sus ministros el uso de Microsoft Office 365 en la nube. ¿El motivo? El Cloud Act de EEUU. Aunque lleve el nombre CLOUD, no trata sobre infraestructura de nube; es el acrónimo de Clarifying Lawful Overseas Use of Data. Que, explicado para un niño como diría Feynman, permite a las autoridades de EEUU pedir a los proveedores de servicios qué datos tienen custodiados o que terceros países pidan esos datos si se trata de la eventual comisión de un delito grave. Llevo años hablando de leyes de soberanía territorial en materia digital. ¿Qué alternativa propone Francia? SecNumCloud, el nombre que le han puesto a un servicio cloud interno. Y me parece un interesante camino a explorar. Si existen conceptos como soberanía alimentaria o sanitaria, ¿por qué no tecnológica y de contenidos digitales? Sé que léeis esto representantes políticos. Echémosle un vistazo, please…
China ha aprobado una serie de normativas para el sector de la automoción que acaban de entregar en vigor. Son parte de una nueva arquitectura de seguridad de datos que el gobierno está construyendo y que también involucrará reglas especializadas para otras industrias. Las nuevas reglas restringirán el tipo de datos que pueden recopilar los automóviles inteligentes y cuánto tiempo se pueden almacenar. Me ha llamado la atención esta especie de “código deontológico en el uso de datos”, porque camina hacia una dirección que puede ser útil para otras regiones y contextos. Primero, tipifica datos “sensibles” que deberán tener mayores protecciones y seguridad. Son aquellos que impliquen personas, áreas militares o zonas de carga y descarga de mercancías. Por otro lado, acota a que los datos solo puedan ser procesados dentro del vehículo, sin salirse de ahí. Además, los fabricantes de automóviles, proveedores y procesadores deberán presentar informes anuales sobre sus prácticas de datos. Ya sé que China, en el imaginario colectivo, tiene un cliché negativo en muchas cosas (sinceramente, no soy capaz de juzgar cuánto de justo es). Pero en este caso concreto, felicito lo aprobado, porque es un emprendimiento regulatorio que creo que puede ser útil.
Estoy reflexionando mucho sobre la entusiasta adopción del metaverso por parte del sector de la moda. El otro día hablaba de Balenciaga y su alianza con Epic Games. Pero hay y habrá más. Avatares digitales, realidad virtual, NFTs y las colaboraciones con los juegos ofrecen un terreno fértil para construir relaciones con las audiencias más jóvenes. Pero también plantea nuevos desafíos éticos. Por ejemplo, en materia de diversidad y de apropiación cultural. En materia de diversidad, por ejemplo, a nivel de género, sabemos que los hombres están más cómodos usando avatares femeninos que a la inversa. También sabemos que los avatares con caras de color negro, son menos demandadas que las de color blanco. Y, en el campo de la cultura. Si entendemos el desarrollo del campo del arte y videojuego digital como una expresión cultural más, ¿cómo quedará conformada su identidad si van entrando las marcas a definir con sus propios códigos de marketing? Como siempre, son preguntas que me hago e investigo, antes de que dentro de tres o cuatro, cuando el metaverso lo tengamos muy presente en el día a día, nos llevemos las manos a la cabeza.
🔊 Un audio
Las comunidades online llevan con nosotros desde hace muchos años. Recuerdo con mucho romanticismo mis primeros días en el chat IRC-Hispano o en foros especializados sobre el futuro de Internet. Una comunidad online es un espacio digital donde la gente se agrupa a conversar en torno a un interés común. En la primera gran crisis de Internet (la de las .com), se puso en duda que este tipo de espacios digitales llegaran algún día a poder ser un negocio. Sin embargo, hay algunos que lo han conseguido. Streamloots y SinOficina (coworking online), son dos ejemplos de ello. En esta entrevista, más detalles sobre cómo medirlas, escalarlas y rentabilizarlas.
💬 Un comentario en redes sociales
Esta comparecencia de Marcelo Bielsa en 2013 cuando entrenaba al Athletic de Bilbao contiene varios aprendizajes de los que me suelo acordar. Es más, suelo compartir este vídeo en varios contextos a lo largo del año. Dice el bueno de Bielsa que las evaluaciones no deben hacerse en función de lo que se obtiene, más bien por lo que se merece. En otras palabras: "No hay que juzgar a un equipo por el resultado, sino por el proceso por el cual se ha logrado ese resultado". Suelo compartir este vídeo, de un campo tan popular como el fútbol, para defender a la gente que toma decisiones en entornos de incertidumbre. Muchas decisiones, acaban en mal resultado, y el que ha tomado la decisión es juzgado por su resultado. Sin embargo, yo tiendo a valorar más el proceso por el que ha pasado. Qué factores ha evaluado, cómo ha ponderado los escenarios, etc. Si el proceso decisional es bueno, y se va revisando e iterando sobre el mismo, los buenos resultados acabarán llegando.
🎲 Una lectura aleatoria
Hablamos mucho de Bitcoin y su valor como criptodivisa. Se discute mucho sobre si invertir o no en ella (ya he dado mi opinión sobre ello). Si sustituirá a otras divisas (también he dado mi valoración de ello). Pero se habla muy poco de realmente qué aportan como valor añadido. Y, también, de cuál fue el problema que dio origen a su concepción. Bitcoin ofreció la primera solución práctica al problema de los generales bizantinos. ¿Y qué problema es éste? Una metáfora para ilustrar un problema social y humano que se da cuando varias máquinas o sistemas informáticos (generales bizantinos rodeando un ciudad) deben consensuar una estrategia (plan de guerra o ataque) para evitar el caos en el sistema (que un general traidor pueda arrastrar a alguno de los leales y evitar el éxito). Por primera vez en la historia, Bitcoin permitió transferir un activo digital, de forma que solo el propietario de dicho activo pudiera transferirlo, solo el destinatario recibirlo y que la transferencia fuera reconocida por todos los participantes que a su vez lo validaban. "Cuando hay un miembro traidor, el consenso de los leales es la clave". Es una manera de reducir la dependencia de éxito o fracaso de un único nodo traidor que puede tumbar a todos los leales por su falta de mecanismos de acuerdo. Los creadores de las primeras monedas digitales en las décadas de 1990 y 2000, buscaban eliminar de las transacciones personales a los bancos y gobiernos del sistema financiero mundial. Una forma de decir que no dependamos de nadie, pero a la vez tengamos un mecanismo para coordinar a los “buenos”. Esta situación, se da en muchos contextos de la vida. Piénsenlo. Por eso la arquitectura distribuida, descentralizada y coordinada a través de una cadena de bloques, es una solución práctica a muchas cosas. Esto y mucho más, en este excelente artículo.
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Hola Alex! Primero que todo, felicitaciones por el éxito de esta newsletter Digital & Data, el contenido es tan bueno, que ya espero siempre cada domingo para leerla sin falta. Y creo que tengo una buena noticia para ti, me atrevo a decir que la "tasa de lectura" es mayor de lo que "tu tasa de apertura" sugiere. Me explico, en mi caso (y quizás el de algunos otros) yo leo el contenido directamente desde mi email, no doy click al link y aunque le doy me gusta en LinkedIn para darle más visibilidad al newsletter dentro de mi red, tampoco le doy click desde allí porque ya la he leído desde mi email. Podrán llamarme "old fashioned" las generaciones más jóvenes, pero si me puedo ahorrar alguno que otro click, tiendo a hacerlo :)
En fin, me alegra mucho el éxito de esta newsletter y que espero que siga creciendo el número de lectores!
BTW: ¿cómo terminó la subasta del NFT de tu foto? (debo admitir que me vi tentado a ofertar)