🚶# 224 La informática y las aceras de tu pueblo
Semana 224: Bluetooth 30 años después y la Ley de Conway
Hola, soy Alex Rayón Jerez. De #bilbao y #millennial (por los pelos). Disfruto mucho mis días en Brain & Code, donde aprendemos tecnología para liderar el futuro.
Bienvenido/a a mi newsletter Digital & Data. Somos más de 18.000 Sapiens (creo) reflexionando sobre cómo los humanos no entendemos una tecnología hasta que no la adoptamos masivamente. Que es, precisamente, lo que está ocurriendo con las tecnologías digitales.
En Brain & Code hemos lanzado un proyecto que ha tenido una gran acogida. Lo hemos llamado “365 relatos de la Inteligencia Artificial”. ¡Muchas gracias a todos/as! Más de 225 suscriptores de pago (mecenas). Al curso-libro (que te llega al email cada mañana para el café) lo hemos llamado “365 relatos de la Inteligencia Artificial”, por hacer llegar los conceptos atemporales de la IA para aprender a manejarte en esta era. Compuesto por 365 relatos, trataremos de hacer un homenaje a esa constante en la turbulencia, a los pilares inmutables de la inteligencia humana que la tecnología jamás podrá replicar. Entra aquí y suscríbete. Toda la información aquí.
📷 Una imagen
Este artículo de SimilarWeb nos vuelve a ofrecer datos tremendamente relevantes sobre cómo está la relación entre motores de IA Generativa y las páginas web. Una semana más, sigo indagando en el tema. La empresa Cloudflare, a través de su herramienta de análisis Cloudflare Radar, ha comenzado a medir la relación entre solicitudes de contenido y referencias efectivas que vuelven a los sitios originales. Los datos hablan por sí solos: por cada visita devuelta, se multiplican exponencialmente las solicitudes. Por ejemplo, Claude, el modelo de IA desarrollado por Anthropic, realizó cerca de 71.000 peticiones de páginas HTML por cada visita efectiva que devolvió al sitio fuente. En cambio, modelos como Mistral presentan un comportamiento más equilibrado, generando hasta diez veces más referencias que rastreos. La lectura es clara: algunas inteligencias artificiales absorben cantidades colosales de contenido sin retornar apenas tráfico. Otras, en cambio, mantienen cierta proporcionalidad. Pero el desequilibrio generalizado es evidente. Las IA se alimentan de internet como un buffet libre, mientras que los editores ven cómo el caudal de visitas se convierte en un goteo. Si quieres ser relevante en motores generativos, echa un vistazo a la tabla de hoy. En la última presentación de resultados de Google, en abril, un analista de J.P. Morgan preguntó abiertamente por el impacto de estos resúmenes automáticos en la tasa de clics. Philipp Schindler, director de negocio de la compañía, evitó la respuesta concreta: “No creo que sea el momento de entrar en los detalles de tasas de conversión y clics”, zanjó. A veces no responder, es responder.
📚 Cinco lecturas
#1 Las aceras de tu pueblo y la informática
En Estados Unidos, el sistema de control del tráfico aéreo, una de las infraestructuras más críticas del país, aún utiliza disquetes para operar partes esenciales de su funcionamiento. Este fenómeno no es aislado. La Administración de Seguridad Social de EEUU también ejecuta millones de procesos diarios sobre mainframes programados en COBOL, un lenguaje con más de medio siglo de historia. A pesar de su estabilidad legendaria, estos sistemas son casi imposibles de adaptar, actualizar o integrar con nuevas tecnologías sin un coste y un riesgo enormes.
Detalles
Es como querer hacer accesible una casa del siglo XIX sin tocar su estructura: todo es caro, lento y peligroso. La alternativa (reconstruir desde cero), parece igual o más costosa, especialmente cuando la presión política y social exige resultados inmediatos, como ocurre con la propuesta de usar inteligencia artificial para acelerar el cambio.
Este dilema (modernizar o no tocar lo que aún funciona) afecta por igual a bancos, aerolíneas, sistemas fiscales y cualquier gran organización con décadas de historia informática.
¿Por qué es relevante?
Las “aceras tecnológicas” con parches y cemento rápido, confiando en que aguanten un poco más, no es buena idea. Mantener viva una infraestructura tecnológica sin renovarla es como seguir usando una bombilla fundida por miedo a cambiar la lámpara. Tarde o temprano, las consecuencias no serán solo técnicas, sino humanas: cheques que no llegan, vuelos que no despegan, trámites que se paralizan. Y eso no lo arregla ni el mejor parche de software.
#2 El impacto de los vídeos cortos en la adolescencia
Un paper muy interesante. Vivimos en una época donde los vídeos de diez segundos definen opiniones, inspiran decisiones y modifican comportamientos. Y ahora, también pueden transformar la forma en que los adolescentes se ven a sí mismos.
Detalles
Una investigación reciente demuestra que basta un vídeo de diez minutos, basado en los principios del growth mindset (mentalidad de crecimiento y todas estas cosas), para lograr que un adolescente empiece a pensar que puede cambiar y desarrollarse.
El estudio, publicado en julio de 2025, revela que este breve contenido digital logró modificar creencias profundamente arraigadas sobre la personalidad y el potencial humano en tan solo una sesión.
¿Por qué es relevante?
El formato breve no está reñido con el impacto profundo. Así como los vídeos cortos moldean gustos y tendencias, también pueden activar mecanismos internos de cambio y superación, especialmente en etapas tan sensibles como la adolescencia. Pero esto funciona para bien… y para mal. Y hacer vídeos hoy es muy barato. Qué miedo…
#3 Las finanzas en el móvil
“Our world in data”, es una página web que recomiendo siempre mucho para estar al tanto de tendencias, datos relevantes, etc. Este artículo, me ha llamado mucho la atención. El dinero móvil ha transformado el acceso a los servicios financieros, especialmente en África Subsahariana.
Detalles
Desde 2010, cuando había apenas 13 millones de cuentas de dinero móvil en el mundo, se ha producido un crecimiento exponencial hasta alcanzar más de 640 millones en 2023. De estas, más de 330 millones están activas en África Subsahariana.
El artículo enfatiza los beneficios concretos del dinero móvil: enviar dinero a distancia de forma rápida y barata, que facilita la migración laboral o educativa y ofrece una red de seguridad para emergencias familiares.
¿Por qué es relevante?
Un poco esa sensación que nos da Bizum para el “día a día”. En este sentido, el dinero móvil se presenta no solo como una herramienta tecnológica, sino como una palanca de desarrollo económico y bienestar social en contextos donde la banca tradicional no alcanza. Y, una de esas innovaciones, que parece estar llegando también a nuestros mundos, donde habrá oportunidades en ese sentido. Un ejemplo de Trickle-up innovation.
#4 Meta y Ray-Ban: más allá de una alianza
Meta ha adquirido una participación de 3.000 millones de euros en EssilorLuxottica, el gigante detrás de Ray-Ban. Esta inversión estratégica no solo consolida la colaboración entre ambas compañías, sino que refuerza la visión de Mark Zuckerberg: el futuro de la inteligencia artificial no está en los móviles ni en los ordenadores, sino frente a nuestros ojos.
Detalles
Meta y EssilorLuxottica ya colaboraban en el desarrollo de las Ray-Ban Meta Smart Glasses, unas gafas que integran cámaras, audio y conectividad con la inteligencia artificial generativa. Sin embargo, esta inyección de capital es algo más profundo: una apuesta estructural por convertir las gafas en la interfaz principal para la interacción con la IA.
Según Bloomberg, la operación está valorada en unos 3.500 millones de dólares, lo que da a Meta un papel más relevante en el diseño, producción y distribución de los futuros dispositivos.
¿Por qué es relevante?
Desde su fundación, Meta ha buscado liberar a los usuarios de las pantallas. El metaverso, los visores Quest y ahora las gafas inteligentes tienen un denominador común: la fusión de lo físico con lo digital sin interrumpir la vida cotidiana. En este nuevo paradigma, las gafas permitirán mantener conversaciones con asistentes de IA, recibir información contextual sobre lo que vemos y acceder a servicios sin necesidad de sacar el móvil del bolsillo.
#5 El protocolo Bluetooth sigue a tope
El pasado domingo, Jack Dorsey (cofundador y ex CEO de Twitter) sorprendió con el anuncio de un proyecto personal que desarrolló durante el fin de semana: una nueva aplicación de mensajería cifrada llamada Bitchat, que funciona exclusivamente a través de redes mesh de Bluetooth, sin necesidad de conexión a internet, cobertura móvil, número de teléfono ni correo electrónico. Una red de malla descentralizada con alcance mucho mayor, completamente independiente de las infraestructuras tradicionales de comunicación. Otra herramienta de comunicación descentralizada, pero con una tecnología de 30 años.
Detalles
El corazón de esta arquitectura es el protocolo Bluetooth, una tecnología con más de tres décadas de historia, pero que sigue mostrando una capacidad sorprendente para reinventarse. Creado en 1994 por Ericsson (entonces, Nokia), el Bluetooth fue inicialmente concebido para sustituir los cables entre dispositivos.
El primer producto comercial con esta tecnología llegó en 1999, el mismo año en que se lanzó el primer teléfono con cámara. Su nombre, inspirado en el rey Harald “Bluetooth” de Dinamarca, simboliza perfectamente su función unificadora: conectar elementos dispares bajo un mismo estándar de comunicación inalámbrica.
¿Por qué es relevante?
Lo notable es que, pese al paso del tiempo, Bluetooth no solo se ha mantenido vigente, sino que sigue creciendo. En el año 2000, apenas se vendieron 800.000 dispositivos compatibles. En 2020, esa cifra había explotado hasta los 4.100 millones, y aunque experimentó una leve contracción en 2024, se espera que alcance los 8.000 millones de unidades anuales para 2029. En una industria donde pocas tecnologías sobreviven más allá de una década, Bluetooth sigue mostrando una resiliencia y versatilidad extraordinarias.
🔊 Un audio
Sapiens, en Radio Nacional.
💬 Un comentario en redes sociales
En este tweet, exponen como las grandes tecnológicas están contratando un 25% menos de nuevos graduados que el año pasado, mientras que las startups han reducido sus ofertas en un 11%. Este ajuste marca una inflexión significativa en el mercado laboral para quienes buscan su primer empleo en tecnología. ¿Por qué? La inteligencia artificial generativa y las nuevas preferencias de los empleadores.
🎲 Una lectura aleatoria
La Ley de Conway se remonta a 1967, cuando el programador Mel Conway presentó un artículo titulado How Do Committees Invent? a la revista Harvard Business Review. Sin embargo, fue rechazado: el comité editorial quería más evidencia empírica. Un año más tarde, en abril de 1968, la revista especializada Datamation publicó finalmente su reflexión, en la que formulaba su ahora famosa ley: “Las organizaciones que diseñan sistemas (en el sentido amplio del término) están limitadas a producir diseños que son copias de las estructuras de comunicación de esas organizaciones”. En términos más simples: el producto que construyes se parece a tu organigrama. Esta idea, hoy conocida como la Ley de Conway, ha cobrado estatus legendario y se observa en todo tipo de empresas, desde gigantes tecnológicos hasta pequeñas medianas empresas alemanas que fabrican lápices. La regla parece ineludible: puedes trabajar con ella, esquivarla en parte, pero nunca vencerla. En una era como la actual, llevo tiempo preguntándome: ¿cuál es el sistema organizativo adecuado para un entorno como el actual, marcado por el cambio constante y la incertidumbre? Tal vez debamos volver la mirada hacia Dee Hock, fundador de VISA. Él no construyó una empresa tradicional, sino un sistema que denominó chaórdico —una combinación de caos y orden. Su estructura se basaba en un conjunto de principios compartidos (el orden), pero permitía gran autonomía y adaptabilidad en sus márgenes (el caos). Los bancos competían intensamente entre sí, pero cooperaban en las reglas comunes que regían la red VISA.
Muchas gracias por leerme una semana más ❤️
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